viernes, 13 de septiembre de 2013

Catorcenal 118: Escribir… ¿para qué?



Por. Tu ausencia pasó a ser mi eternidad…


En solidaridad con Alberto Patishtán,
profesor inocente y “judicialmente” preso en Chiapas, México.


Escribir para manifestar nuestro desacuerdo con la manera de conducir este país, con quienes dicen ser “autoridades” y sus instancias de “gobierno”.

Escribir para sanear heridas, desterrar temores, erradicar rencores y sublimar el dolor (antes desamor), para superar el objeto de nuestro deseo y aceptar nuestra realidad, como proyecto de vida y objeto de estudio.

Escribir para congraciarse con la vida, para NO olvidar y SI decir, que SI-EM-PRE tendremos oportunidad de abrazar nuestra vida y hacer algo con ella. Para no cesar en nuestro esfuerzo por hacer de este país un lugar menos pinche y –en la medida de nuestras posibilidades- más humano.  

Escribir para decirle al mundo: “aquí estoy y no dejaré de expresar lo que piense aunque no haya medio (quisimos escribir miedo) de INFORMACIÓN que lo publique”. Al desamor hubo que agregar el desempleo, para entonces demostrar de qué estamos hechos… una vez más. Lo sabemos, habrá que sobreponerse a la realidad y probar –con hechos- que ahora más que nunca es urgente CON-TI-NU-AR en esto: La escritura, como una apuesta cotidiana por nuestro derecho a generar información y transmitirla. Esfuerzo comunitario por la posibilidad de establecer un diálogo, procurar el entendimiento mutuo, recíproco, y en la medida de lo posible DIALÉCTICO. Re-evolucionar, modificar nuestros patrones de interacción y excitarnos mediante la relación humana que llamamos Comunicación.

Escribir para decirle al pinshi-gobierno que ya estuvo bueno. Que existe un sector pensante en la prensa -de este conjunto de países que llamamos México- que no está dispuesto a aceptar, ni tolerar atrocidades, el linchamiento mediático,  la  represión, denostación y tampoco la desvalorización de las diferentes manifestaciones de inconformidad social; porque viviendo en 2013, asistimos a tiempos con definiciones históricas, que pueden ser entendidas como retrocesos.

Escribir para no permitir que una bola de atolondrados e ineptos destruyan deliberadamente lo poco que nos queda, es ahora y nos toca, este es el momento, si no es por nosotros que sea por nosotros. Así como no dejaremos de ser periodistas, aunque los medios se resistan a difundirnos, usted no dejará de ser ciudadan@ porque el gobierno lo ignore o reprima.

Escribir si, para exorcizar demonios (a.k.a. fantasmas), lo cual implica ser adulto en un lugar como México: cementerio andante y corrupto, tierra fértil para la impunidad pero también, y esto hay que decirlo: espacio para la manifestación de otras voces, LAS VOCES. Nuestras realidades son eso, NUESTRAS. Tomémoslas y responsabilicémonos, el momento es ahora -como nunca antes- , a darle que hay jale…

Una raya más al Tigre…

Invitación a compartir el pastel de cumpleaños con esta Estrella de Burlesque. La cita es el sábado 28 de septiembre en “La Caverna Rock & Bar”, ubicado en el interior del Centro Cultural Veracruzano, avenida Miguel Ángel de Quevedo, cuadrante de San Francisco Coyoacán, Ciudad de México-Tenochtitlán en punto de las 22 horas.

¡Cumbia y fuera!


viernes, 16 de agosto de 2013

Catorcenal 117: Senectud.



Por. Me tienes que olvidar cuando me vaya…

Para el abuelo Guillermo:
“A donde quiera que vayas, estarás siempre aquí y donde quiera que yo esté… 
estarás siempre conmigo”.

 #DelBrazoPorLaCalle


El próximo miércoles 28 de agosto se celebra a las y los abuelos. En contraste con el día de las madres, incluso con el día del padre; esta celebración no tiene tanta mercadotecnia alrededor, quizá porque la vejez –al igual que el sexo-, sigue siendo un tema tabú.

Resulta difícil, casi imposible, pensar en llegar a viej@s, no lo decimos sólo nosotros, también lo confirman quienes día con día, recurren a diferentes métodos y/o tratamientos para aparentar menos edad.

Pese a ello, la esperanza de vida se incrementa, algunos padecimientos que antes eran mortales (diabetes, hipertensión e insuficiencia renal) se han vuelto crónicos; las y los médicos optan por la especialidad de geriatría y se olvidan de la pediatría. Los edificios, sobre todo los que albergan servicios públicos, adoptan sus instalaciones con elevadores, rampas, espacios para circular con muletas o andaderas, y los pocos Centros de Desarrollo Social que subsisten, tanto en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) como en el Instituto de Seguridad Social y Servicios para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) aumentan la matrícula de sus cursos con “personas de la tercera edad” o “adultos mayores”, como eufemísticamente se les ha venido llamando de unos 10 años para acá.

Lo cierto es que NO estamos del todo preparados, ni estructural, ni culturalmente. Lo sabemos porque son estas personas quienes se encargan de empacar nuestras provisiones en cualquier tienda de autoservicio o cuando vemos que son mayoría entre la población indigente.

Por esta razón es que películas como “La demora” (Rodrigo Plá), “No quiero dormir sola” (Natalia Beristáin) y “Nos vemos papá” (Lucía Carreras); más que entristecer, obligan a reflexionar… 

¿Qué estamos haciendo con nuestros padres y/o abuelos? ¿Qué va a ocurrir con los jóvenes sin oportunidades una vez que envejezcan? Ante sistemas de pensiones privatizados y rebasados, empleos informales sin prestaciones y subcontratación al por mayor. Incertidumbre extrema que todos tendremos que afrontar, más temprano que tarde, situaciones que todos vemos, pero casi nadie está dispuesto a entender o explicar, y no se diga hacer algo al respecto.

Recientemente la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) puso en marcha el "Seminario Universitario Interdisciplinario de Envejecimiento y Vejez", que a través de la interdisciplina buscará ofrecer soluciones a los complicados escenarios que aludimos previamente. No obstante, es urgente empujar la reflexión en nuestros círculos más inmediatos (familia, amigos, conocidos, parejas, compañeros de trabajo) como una labor de sensibilización que reivindique la sabiduría que han acumulado nuestros ancianos durante años.

Escribimos “nuestros” para iniciar dicha labor con quienes lean esta “reflexión casi quincenal”, que en esta ocasión buscó devolver su justa dimensión a quienes supuestamente NO vemos, pero al momento de requerir algún apoyo o consejo seguramente ahí estarán.

Por último, quisimos dejar un espacio para la esperanza, como la confianza o el estado de ánimo en el cual se nos presenta como posible aquello que deseamos, para esperar –aunque sea con poco fundamento- que se conseguirá lo pretendido. Para seguir cantando como lo hacían nuestros abuelitos:

"Mete tus sueños en una bolsa de esperanzas para que los uses cuando pase el dolor, por eso esta es una canción de esperanza, o quizá sólo una humilde plegaria…”


Publicidad Integrada

Le invitamos a la presentación de la edición de agosto de la revista Zócalo: “Publicidad disfrazada, el gran pendiente”. La cita es el lunes 26 de agosto de 9 a 11 horas, en la Sala Fernando Benítez de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM.



viernes, 26 de julio de 2013

Catorcenal 116: Carlos Fazio



Por. La vida es individual…

Para la (banda) URSS, bajo el árbol:
Porque “vivimos siempre juntos y moriremos juntos…”

A la memoria de Alejandro Santiago:
Migrante, pinto-escultor y oaxaqueño ENORME.


A Carlos Fazio (Montevideo Uruguay, 1946) lo conocí en mayo de 2006, en ese entonces buscaba un analista que reuniera las piezas que yo percibía dispersas: El Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de San Salvador Atenco, “La Otra Campaña” del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), la actitud atroz y represiva por parte de los tres niveles de gobierno en México. Entonces encontré una pieza periodística publicada en el diario La Jornada, titulada: “Atenco y el terror benigno” –aún la conservo en su versión impresa, como la obra de arte que resultó después-. En ella, el periodista explicitaba el operativo del tres y cuatro de mayo de hace siete años, como una estrategia de contrainsurgencia realizada por la policía militarizada, en contubernio con los medios de des-información y sus voceros, clamando por que se aplicará el Estado de derecha.

Tempo después, al platicar con un compañero que me precedía en semestres y estudio-análisis de los movimientos sociales, supe de la clase optativa que el profesor Fazio impartía en la carrera de Ciencias de la Comunicación: “La información política y la realidad Latinoamérica del Siglo XXI”. Por él conocí un libro clásico de Franz Fanon, “Los condenados de la tierra”, asimilado posteriormente como “Los condenados a luchar”, también me empapé del “acuífero guaraní”, reserva estratégica de agua dulce en América Latina, un tema sumamente relevante para tres transa-nacionales: Coca-Cola, Danone y Nestlé.

En resumen, se trata de un curso sobre la privatización de los servicios públicos y el agandalle de los recursos naturales por parte de las grandes corporaciones, mediante el servilismo de “gobiernos” gerenciales e ilegítimos. En marzo de aquel año, se había realizado el IV Foro Mundial del Agua en la Ciudad de México, evento que cubrí de forma escueta y bastante superficial para la Agencia Universitaria de Noticias (AUNAM), quizá porque en ese entonces no tenía LA VISIÓN GEOPOLÍTICA de las circunstancias, que mi profesor, también colaborador de la sección de opinión del diario La Jornada, afina, ejercita y pule mediante su cátedra.

En sus clases, proporciona referencias importantes con respecto a diferentes temas: El “tercer vínculo”, pues además del lazo económico y político, existe un tercero, quizá más peligroso y menos comprendido, el militar. El avance paulatino de la para-militarización en América Latina, primero mediante el Plan Colombia, después con el Plan Puebla Panamá, ahora mediante el Proyecto Mesoamérica. Sin olvidar las dictaduras de los años 70 y 80 en la región; pero enfatizando en la actual criminalización de la protesta social, así como el combate deliberado al “crimen organizado”, referido indistintamente, lo mismo como “narcotráfico”, que como “narcoguerrilla” o “narcoterrorismo”.

Además, Carlos Fazio contribuye a reflexionar sobre “la mentira como arma de propaganda”, que utilizada a niveles masivos, consigue inmovilizar el descontento social y adoctrinar ideológicamente a los habitantes de “Estados canallas”, categoría que retoma de Noam Chomsky, otro pensador contra-hegemónico. Si como dice Lydia Cacho, “el ‘plan b’ es esa otra posibilidad para entender el por qué de las cosas, un punto de vista desde otros ángulos”, eso es lo que forman y aportan, tanto Chomsky como Fazio.

El pasado jueves 11 de julio, impartió cátedra nuevamente, al presentar su libro más reciente. A reserva de lo que publicará más adelante revista Zócalo, puedo adelantar que se trata de una suma de fascículos de los temas que solía desarrollar en clase, que bien podrían leerse de forma aleatoria. El libro es una rigurosa investigación periodística, sustentada en más de 700 citas, con referencias a documentos o bibliografía precisa, que integran lo que el autor definió como “una herramienta contra-hegemónica” y que lleva por título, “Terrorismo mediático, la construcción social del miedo en México” (Debate, 2013).

La obra documenta la historia reciente de este país, con una perspectiva regional, desde los “atentados” del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos, pasando por el asesinato del conductor de televisión Francisco “Paco” Stanley (1999), la huelga estudiantil de ese mismo año en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el linchamiento de tres efectivos de la Policía Federal en Tláhuac, Distrito Federal (2004), la “danza” del desafuero en contra de Andrés Manuel López Obrador, los operativos de contrainsurgencia en Guadalajara (OMC), Atenco y Oaxaca (2006), así como las elecciones pre-demenciales 2006 y 2012. Esto último resulta trascendente, porque nos devuelve “al diagnóstico del estado de cosas en la >>República de Televisa<<, donde han quedado a la vista las miserias del sistema político controlado por la dictadura del rating y el poder del dinero”.

Por Carlos Fazio conocí, leí y estudié con Jorge Turner, por él supe también del obispo Sergio Méndez Arceo y la teología de la liberación en América Latina, entre muchos otros temas… Redacté esto en primero persona, por la gran admiración que me provoca aprender de un hombre tan lúcido e incansable como él, a tal grado que considero que el mejor homenaje en vida que se le puede hacer, además de difundir su labor… es leerlo.


viernes, 28 de junio de 2013

Catorcenal 115: Veracruz (elecciones).



Por. Caricaturas de amor.

Para Artemio y Miguel:
Porque las niñas y los niños de hoy merecen heredar otro país… un gran país.


En un viaje exprés pudimos constatar el cacicazgo político que prevalece en Veracruz, con miras a las elecciones locales que tendrán lugar el próximo domingo 7 de julio; aunque no sólo ahí, también en Baja California, Puebla, Oaxaca, Chihuahua y otras entidades; en las cuales no ha ocurrido la “alternancia administrativa”, y si la hubo, no sirvió de mucho.

Tanto los Yunes, como Fidel Herrera, y el sátrapa de Javier Duarte, recurren a la misma promesa “A (inserte aquí el nombre del municipio de Veracruz que prefiera) le conviene”, pero sin especificar qué y mucho menos cómo.

La incultura política es demasiado compleja, como para reducirla a la compra-venta de votos, “una dinámica que sólo denota desprecio hacia los votantes”, como diría el caricaturista Rafael Barajas a.k.a. “El Fisgón”. También está, por ejemplo, el embarazo prematuro y la carencia de una educación sexual integral, con perspectiva de derechos humanos (sexuales y reproductivos), apegada a criterios científicos. Porque tener muchos hijos o tenerlos demasiado jóvenes, es sinónimo de reproducir miseria, perpetración de desigualdad e inequidad social, la misma que antes denunciamos desde Guerrero, pero como lo reflexionó la lectora “Gretel a secas”: “hay que embarazarse menos y superarse más”.

Lo anterior, sólo como muestra de a qué nos referimos cuando decimos que lo que ocurre es demasiado complejo. Porque ni a la oligarquía local y tampoco a la iglesia, le interesa ni conviene que los habitantes se instruyan, reflexionen y cuestionen sus circunstancias.

Mención aparte merece el acoso, persecución  y los asesinatos de periodistas críticos al gobierno estatal, muy por encima de la intimidación del “crimen organizado”, ¿qué se puede hacer en un país donde predominan las agresiones de funcionarios públicos o los cuerpos de seguridad? Instancias que en teoría, tendrían que proteger, garantizar el libre ejercicio de la labor informativa y blindar el derecho a difundir información por cualquier medio. No hay que olvidar que en Veracruz fue donde se intentó criminalizar a un par de usuarios de Twitter por “difundir un rumor como información verídica”, según se adujo.

¿A dónde va una sociedad que no se permite desentrañar lo electoral para vislumbrar su trascendencia en lo político? Pensemos en el costo de la deshonestidad, la falta de ética, el servicio público denigrado en negocios familiares al amparo del poder, la impunidad como norma, el secreto a voces que representa la corrupción y la escasez de ALTERNATIVAS REALES para que esta situación cambie y el cacicazgo político-regional disminuya… ¿cuántas personas estarían dispuestas a emprender acciones para que la abdicación ciudadana y el entreguismo popular sean la excepción y no la regla? 

Se cumplieron cinco años del crimen perpetrado mediante el incendio de la estancia infantil ABC en Hermosillo, Sonora y qué hicimos; ¿sentarnos entre los deudos en el Ángel de la Independencia para compartir el dolor y desde ahí ver pasar a la sociedad indolente? Quesque muy activa en lo virtual, pero poco combatiente en los hechos, no se diga en el debate y la discusión de ideas, porque además de estar plagado de corrupción, en este país está sobrada la indiferencia. Somos residentes –y no ciudadanos- que comparten la corta memoria de un gobierno atroz.

¿Qué nos queda, aparte de la palabra para denunciar o condenar enérgicamente? Tenemos la posibilidad de sublimar el dolor, mediante documentales, canciones, performance, entre otras opciones para continuar en nuestra exigencia de justicia.

Sólo esperamos no morir antes de que algo serio suceda en este país, porque lo único que nos queda, es elegir trinchera y alentar la lucha; ya que no sabemos vivir de otra manera. Mantengamos la esperanza, que es como explicó Pedro Ultreras, periodista y director del documental “ABC: Nunca más”

“Mientras tengamos vida, debemos mantener una esperanza para continuar luchando y seguir viviendo, si no es por nosotros… por nuestros seres queridos”.


Tres regalos:

#DíaDeLasMadres Papá soltero (el cielo).
#DíaDelMaestro Alumna de primaria (la luna).
#DíaDelPadre Sobrino “diverso” (el mar).


Porque las mejores lecciones vienen de quien menos lo imaginas… siempre.


viernes, 14 de junio de 2013

Catorcenal 114: Acapulco (de Juárez).



Por. Una danza que nunca va a bailar nadie. 

A las y los normalistas, que luchan y resisten:
Porque se pierde todo, menos la dignidad...


Ciudad y puerto de Acapulco Guerrero, perla elegante, paraíso mundial y a la vez punto estratégico de la República Mexicana… ¿a qué fuimos? A presentar al mundo los resultados finales de nuestra tesis de maestría que tendrá su réplica oral en el segundo semestre de 2013. Antes le compartimos la ponencia presentada en el III Encuentro Internacional de Investigación en Estudios de Género, para cualquier duda, comentario o sugerencia que guste hacernos llegar.

Además, pudimos comprobar que las y los guerrerenses, no están tan preocupados por el 4to. Aniversario del crimen de la estancia infantil ABC en Hermosillo, Sonora; porque sus preocupaciones son otras: pescadores que ya no pueden serlo ante el avance voraz del sector turístico, agricultores que tendrán que dejar de vivir de la tierra, ante el avance descomunal de la minería “a cielo abierto”. En este aspecto, Guerrero al igual que Michoacán y Morelos, son bombas de tiempo, por lo que se requiere altura de miras y sensibilidad política, para entender lo que está ocurriendo en esos estados, ante la proliferación de grupos de autodefensa o guardias comunitarias y el rechazo creciente a la contra reforma educativa (que también repercute en lo laboral).

Acapulco es tierra fértil para la antropología sociocultural vía los estudios de género, pero también y sobre todo, para el análisis y la comprensión de la resistencia magisterial, el despojo a quienes eran pescadores y campesinos; cuyos descendientes ahora están a cargo de la seguridad en los hoteles, centros de convenciones y fraccionamientos residenciales. Un lujo exuberante que ellas y ellos construyen, pero que nunca podrán disfrutar.

No, porque el sector servicios además de excluyente y jerárquico, contribuye a perpetuar la inequidad social. “Tanto tienes, tanto vales”, lo mismo en restaurantes, que en las discotecas (¿todavía se usa la palabreja?). Esto hace que apremie una “teoría del resentimiento social”, que considere el abuso de autoridad, la indiferencia gubernamental y el desdén legislativo, al que hoy se enfrentan las y los guerrerenses.

Sin duda, antes que desprecio y descalificación, es preciso analizar, desagregar y comprender estas “causas profundas”, lo cual, sólo es posible mediante la interacción directa con quienes están involucrados. Ante la inconformidad magisterial devenida en descontento social, los grupos de autodefensa y el crimen organizado, que se ha afianzado en diferentes estados del país, particularmente en la región de la “costa chica y la montaña alta” de Guerrero. Los primeros prosperan por un vacío de poder-seguridad que el Estado ha permitido y los segundos por la complicidad de gobiernos (federal, estatal y/o municipal), que encuentra en Acapulco su botón de muestra.

Aunque la presente “reflexión casi quincenal” no pretende ser alerta, si constituye una alarma; para cuestionar la falsa idea de que en la capital del país (Ciudad de México, Distrito Federal y zona conurbada o Área Metropolitana del Valle de México) la cuestión de seguridad esté blindada. Quienes vivimos, estudiamos y disfrutamos del arrabal en sus diferentes manifestaciones, sabemos y somos testigos de la descomposición social que antes se enfatizó en Ciudad Juárez, Monterrey o Culiacán y después en Acapulco. Su “aparente” instalación en México-Tenochtitlán será, por así decirlo, resultado de un análisis previo en prospectiva. Por supuesto que las circunstancias pueden cambiar (para bien o para mal), no obstante, urge ponerse sesud@s, analític@s, sensibles y perceptiv@s, antes de que sea demasiado tarde…

Lección primaveral:

“A veces hay que perder para seguir adelante, CRECER y (eventualmente) ganar...”

De la serie: La vuelta al mundo para abrazarte por la espalda y otras historias que no hemos de vivir.




miércoles, 29 de mayo de 2013

Catorcenal 113: Diversidad y Género.



Por.  Acompañar tu soledad.

A las y los audaces: por las lecciones que brindan sin saberlo…


El género, es un concepto de reciente incorporación a la academia y la investigación, ya no digamos a la vida diaria. “Los hombres también tenemos género”, con esta frase breve, pero trascendente, concluyó nuestro paso por el Programa Universitario de Estudios de Género (PUEG) de la UNAM.

El PUEG, instancia universitaria que celebró sus primeros veinte años en noviembre de 2012, es responsable de coordinar la docencia, investigación y divulgación que se realiza en materia de género al interior, pero sobre todo, al exterior de la Universidad Nacional, como la iniciativa “pedagogías en espiral” con las mujeres internas en el penal de Santa Martha Acatitla

Durante esta etapa de investigación, que culminará con la defensa oral de la tesis de maestría, “Masculinidad Aprendida: Factores asociados a la transmisión del VIH por relaciones sexuales entre hombres de la Ciudad de México”; pudimos constatar el carácter transversal del aspecto social y cultural que hoy ocupa esta “reflexión casi quincenal”: Género como categoría para el análisis científico, la denuncia social y la transformación de la vida (personal y con las demás).

Género como categoría liberadora, que puesta en relación con otras como clase social, cultura, migración, nivel educativo, entorno urbano o rural; ayudan a problematizar y vislumbrar las soluciones a los problemas de investigación en abstracto, pero también –y sobre todo- los ocasionados en el día a día, por la inequidad que implican las relaciones sociales… de género.

Porque en México, no es lo mismo nacer biológicamente hombre que mujer, tener o sentir atracción sexual por una persona de su mismo sexo, ser lesbiana o transexual. Sólo así se explica el surgimiento de tesis con el título: “Homofobia, machismo y misógina, a partir de tres canciones del grupo Molotov", adivine cuáles son...

Urge diferenciar entre género y “sexo”, lo segundo remite a la cuestión biológica e impide dimensionar los fenómenos socio-culturales que el género si permite vislumbrar. Mediante la de-construcción económica-política-socio-cultural de la convivencia cotidiana entre los seres humanos. Personas que sienten, se equivocan, sufren y gozan, pero también se ven a si mismas como objetos de estudio. Por eso es que se recurre al género para referirse a la disforia, entendida como la inconformidad con todo aquello que es impuesto mediante el género, cómo deben comportarse las mujeres, pero sobre todo los hombres: violentos, agresivos, indolentes.

Parafraseando a Marcela Lagarde, “los hombres también tenemos cautiverios”, lo entendemos cuando Juan Guillermo Figueroa cita una línea de Pablo Neruda: “sucede que me canso de ser hombre”, porque agobia lo que la sociedad exige a  quienes nacen biológicamente como varones, desde ejercer un rol de padre de familia protector-proveedor, hasta impedirle externar sus temores y sentimientos.

Estas y otras ideas, serán compartidas y pulidas, durante nuestra participación en el III Encuentro Internacional de Investigación en Estudios de Género, que tendrá lugar en la ciudad y puerto de Acapulco Guerrero, entre el jueves 6 y sábado 8 de junio de 2013. Además de disertar sobre estos temas, tendrá la posibilidad de confesarse ante el mar, así que si tiene oportunidad de estar allá, no deje  de interpelarnos al respecto.

A modo de posdata, diremos que se requiere audacia, osadía para cuestionar los “mandatos de género” y sus respectivos roles. Es preciso deconstruir los mensajes con que nos bombardean los medios, sin olvidar que “el mejor policía es el que se instala en nuestra cabeza”, como advertía la juventud en 1968.

Lo único cierto, es que estamos en el siglo XXI, aunque en ocasiones hayan quienes piensen, actúen y legislen como súbditos-parroquiales del siglo XVI o XIX. Urge que los docentes se sensibilicen, que la comunidad a favor de la diversidad social (reducida a sexual) amplíe su re-conocimiento, mediante la apropiación y puesta en práctica de la perspectiva de género; audazmente conducida por los terrenos más insospechados y reticentes al cambio. En esto último, hogares, familias y el inicio del proceso de socialización que representa la infancia, tienen mucho que aportar y  la perspectiva de género, entendida como zoom sociológico (Fátima Fernández Christlieb, dixit!) puede contribuir a su diseccionamiento.

A unas horas de que comience junio, referido por #Catorcenal como “mes de la diversidad”, podemos decir que apostamos por el reconocimiento de lo diferente, para asumir la diversidad social, compleja, incierta, maniquea a veces, y en eso nos parecemos a nuestros problemas (de investigación) y cotidianos, sólo falta responder ¿qué tan dispuestas estamos a salir de nuestras zonas de confort?

Le esperamos en Acapulco para seguir con este intercambio…

#DíaDelMaestro

Carlos Fazio (periodista): “Cuando todo se reduce al ‘derecho de terceros a transitar’, se debe insistir en reflexionar y desagregar la desigualdad social. Atender, pero sobre todo, entender el problema por sus causas y no por sus consecuencias. Eso es lo que debe ofender, la falta de oportunidades, el desempleo, la violencia sistemática y criminal, en la que cualquiera puede ser víctima. Ante eso, la única consigna del pensamiento crítico y responsable sería, con el gobierno… nunca”.



miércoles, 8 de mayo de 2013

Catorcenal 112: Sara Lovera.



Por. El derroche de todas las noches que da la juventud.


A Regina Martínez (corresponsal del semanario Proceso):
A un año de su asesinato en Veracruz, el clamor no cesa… ¡justicia!

En los meses recientes hemos estado cerca de diferentes mujeres periodistas. Voces femeninas que nutren la disección y el análisis del diario acontecer: Marcela Turati, Lydia Cacho, Carmen Aristegui, Denise Dresser, Nora Patricia Jara, Anabel Hernández y… Sara Lovera.

Conversar con ella es recibir una cátedra periodística de y en contra de la inequidad social. Es coordinadora regional de la Agencia de Noticias de la Mujer Latinoamericana y del Caribe (CEMLAC) y editorialista semanal del Instituto Mexicano de la Radio. “La palabra de Antígona”, como se le conoce en el “submundo” de las redacciones, por la columna semanal que publica y muchos medios replican, a lo largo y ancho de los diferentes México’s para así tomarle el pulso a diferentes temas: violencia en contra de las mujeres, feminicidio, trata, vulnerabilidad económico-socio-cultural (migrantes, periodistas, defensoras de derechos humanos, trabajadoras sexuales o domésticas), interrupción legal del embarazo, entre muchos otros.

Hace unas décadas, dirigía el semanario feminista del periódico La Jornada, “en tiempos en que este diario era un periódico de mucho más peso político que el de ahora”, según sus propias palabras. Una trinchera similar “inventó” en Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC) A.C, agencia de noticias con perspectiva de género, que además de abrir debate y sentar precedente informativo respecto a los temas antes mencionados, constituyen la prueba imperiosa de hacer siempre buen periodismo.

Sara Lovera considera que “no hemos llegado a reconocer a las mujeres como personas completas, por el contrario, las seguimos viendo como cuerpos de deseo. Sin otro papel más que el de madres, amantes, objetos sexuales, brujas, putas o monjas, pareciera que no somos seres humanos completos. Así lo reflejan los medios, quienes escriben en ellos… con sus prejuicios, los discursos antiguos en las aulas del Sistema Educativo Nacional”.

Para contrarrestarlo pide: Tener presente la realidad, y que ésta va cambiado dramáticamente. Investigar, porque hoy no hay pretextos, y en cambio hay bastante información. “Aunque los medios no hablen de nuestros derechos”, recrimina para después afirmar: “Al contrario, contribuyen a revictimizar a las mujeres. Reafirman perfiles tradicionales, mucha de su programación o contenido, en el caso de los impresos, reflejan una mujer que sólo existe en las partes ideológicas. Todavía creemos que la vecina nos va a quitar el marido, porque tampoco nosotras hemos evolucionado de forma pareja, es decir, no porque exista feminismo, las mujeres ya saben que tienen derechos. Una de las cosas graves que los medios no hacen es hablar de ellos y eso provoca una masa femenina que no los conoce”.

Importante planear, redactar y corregir esta "reflexión casi quincenal", en el marco del Día Mundial de la Libertad de Prensa (3 de mayo), que la UNESCO decretó hace 20 años. Trascendente hacerlo en un país tan complicado e inseguro para el ejercicio periodístico como México en 2013; cuando se mantiene el asedio constante a instalaciones de medios, ante agresiones frecuentes contra periodistas y comunicadores, impunes la mayoría de las veces.

Ante dichas circunstancias, urge entender que como sociedad, todos perdemos cuando grupos criminales, intereses empresariales (legales o ilegales) y/o cacicazgos políticos, agraden periodistas (esto incluye el acoso judicial por parte de funcionarios públicos). Urge contar con un periodismo más crítico, solidario, que incomode al poder y a su vez, tenga la capacidad de generar sus propios códigos de ética, construir estrategias para blindar la información y establecer medidas precautorias ante la barbarie. También hacen falta más periodistas que vivan y trabajen con pasión, por oficio antes que por título. En pocas palabras: más historias que contar como la de la maestra, Sara Lovera.

Deseo primaveral...  

El mismo que Alan Castillo a.k.a. @Alanez: Quiero ver mis cicatrices, recordar siempre, vivir de la misma manera: conmovido y sin pretensiones. Caminar y no sólo pasar por la vida. Que el orgullo sea mayor al recuento del quebranto, de la pérdida y que las circunstancias adversas nunca signifiquen más que el peso de la gracia. Vivir aquí y ahora…

 Que así sea… #Catorcenal


miércoles, 17 de abril de 2013

Catorcenal 111: Nostalgia.



Por. Desnudarte el pensamiento.

A Carlos Fazio: Por la maestría en el periodismo.


“No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió”.

Joaquín Sabina

Nostalgia: es la pena de verse ausente de personas o cosas queridas: parientes, la patria o los amigos. Un sentimiento de tristeza melancólica originada por el recuerdo de una dicha perdida. En #Catorcenal sentimos nostalgia por estaciones de radio en Amplitud Modulada (AM), videocaseteras Beta o VHS, monitores monocromáticos y el sistema operativo MS-DOS, las impresoras de inyección, los diskettes de 3 ½ , la permanencia voluntaria en el cine desde la matinée, las caricaturas de Hanna Barbera , el “monchis” del receso en la escuela telesecundaria (cacahuates con salsa valentina, frutsi congelado y chicharrones preparados), máquinas de escribir Olivetti, LP’s de acetato y las consolas donde los tocábamos, los viajes en tren, la Ciudad de México con autobuses Ruta 100 y sin Metrobús; gatitos de chocolate y cacahuates garapiñados en el Cine Olimpia, películas rentadas en el videoclub de la cuadra, cassettes regresados/adelantados con una pluma, el chismografo, las idas de pinta, San Andrés Totoltepec, los 10 años transcurridos desde el primer viaje a Jalisco. Nostalgia por el barrio que nos vio crecer, mismo que hoy nos reconoce y ubica para no perder piso.  

Es como escribió El Gus: “Los momentos existen como posibilidades infinitas en el universo. Momentos inesperados que evocan cualquier sentimiento, cualquiera, el que sea y como sea, pero son posibles, existen. Wikipedia dice que nostalgia viene del griego clásico (νόστος «regreso» y ἄλγος «dolor»), y la describe como un sentimiento o necesidad de anhelo por un momento, situación o acontecimiento pasado.  Sin querer, estas posibilidades infinitas llegaron repentinamente con un grado de nostalgia, pero ésta vez sin dolor (como otras veces). Me mandaron a hermosos recuerdos que en una 4ta. dimensión (espacio-tiempo) marcaron nuestros mundos (paralelos entre sí), pero unidos en algunos puntos: la misma música, diversión y un momento generacional único, para que tuviéramos la fuerza de quitar el dolor del concepto nostALGIA y al recordar, sonreír nuevamente en nuestros mundos paralelos, sin dejar de lado los puntos que nos unen: la misma música, la diversión y un momento generacional que continúa.

Pero también, es como apuntó Elvia Moreno: “La gente que vive en internet (según el libro “Nómadas digitales”) ha migrado sus relaciones personales: trabajo, amistad, amor y sexo a la red, incluso existe el second life. Ahora vivimos en un mundo en el que los valores son los de una sociedad globalizada, que exige flexibilidad y valora más a la gente nómada contemporánea, capaz de cambiar de vida, de trabajo, de país de un día para otro; antes a la gente que cambiaba constantemente de trabajo se le veía como inestable, y ahora a la gente estable se le ve como un 'pobre diablo' que no busca nuevos retos. Todo es relativo y cambiante, ni mejor ni peor, son las circunstancias las que obligan a adaptarse”.

Invade la nostalgia porque la aparente comodidad y el supuesto confort que se obtiene de las innovaciones tecnológicas cada vez más vertiginosas, nos llevan a la deshumanización. Apatía, indiferencia y desinterés, aparecen como características de una época  en que supuestamente es imposible vivir AFECTOS REALES. Estos se trasladan al terreno de lo virtual/material, y se mal interpretan en cuántos contactos, likes o comentarios se obtienen con lo publicado en las REDES VIRTUALES, para con esos datos “proyectar”, lo mismo la imagen de gobiernos autoritarios y partidos políticos desvirtuados; que nuestra “afinidad” como sociedad. Olvidando la importancia y trascendencia que tiene el ser  por encima de la apariencia.

No se trata de volver a lo arcaico, tampoco se busca ir atrás para “recuperar” aquello que inspira nostalgia. Al contrario, es valorar cómo todo eso mencionado al principio de esta reflexión nos permitió llegar hasta donde estamos ahora. Reivindicar lo que hemos sido y adquirir sentido de por qué hemos involucionado a tal nivel. Ante la violencia cotidiana, en un contexto de capitalismo financiero voraz, que ya no esclaviza como hace más 100 años hacían las tiendas de raya, pero si succiona y somete el ímpetu de vida, socava las alas de libertad y desestima la esperanza de una sociedad tan poco participativa, pero sumamente nostálgica como la mexicana.

Nostalgia si, como condición de “vulnerabilidad emocional”, pero también (y sobre todo) como posibilidad de crecimiento. Lanzarse al vacío y practicar el vuelo, comenzar de nuevo. Quizá con miedo, pero fortalecidos, íntegros… MADUROS. Nostalgia que hoy nos permite saludar (mediante correo electrónico) a quienes están lejos, para decirles: ESTO NO SE ACABA HASTA QUE SE ACABA. Seguiremos reflexionando hasta que la luz de nuestros ojos se apague definitivamente, y para eso estamos seguros, falta bastante tiempo. Así que por favor, no deje de escribir a pesar de la nostalgia lacatorcenal@gmail.com