miércoles, 29 de mayo de 2013

Catorcenal 113: Diversidad y Género.



Por.  Acompañar tu soledad.

A las y los audaces: por las lecciones que brindan sin saberlo…


El género, es un concepto de reciente incorporación a la academia y la investigación, ya no digamos a la vida diaria. “Los hombres también tenemos género”, con esta frase breve, pero trascendente, concluyó nuestro paso por el Programa Universitario de Estudios de Género (PUEG) de la UNAM.

El PUEG, instancia universitaria que celebró sus primeros veinte años en noviembre de 2012, es responsable de coordinar la docencia, investigación y divulgación que se realiza en materia de género al interior, pero sobre todo, al exterior de la Universidad Nacional, como la iniciativa “pedagogías en espiral” con las mujeres internas en el penal de Santa Martha Acatitla

Durante esta etapa de investigación, que culminará con la defensa oral de la tesis de maestría, “Masculinidad Aprendida: Factores asociados a la transmisión del VIH por relaciones sexuales entre hombres de la Ciudad de México”; pudimos constatar el carácter transversal del aspecto social y cultural que hoy ocupa esta “reflexión casi quincenal”: Género como categoría para el análisis científico, la denuncia social y la transformación de la vida (personal y con las demás).

Género como categoría liberadora, que puesta en relación con otras como clase social, cultura, migración, nivel educativo, entorno urbano o rural; ayudan a problematizar y vislumbrar las soluciones a los problemas de investigación en abstracto, pero también –y sobre todo- los ocasionados en el día a día, por la inequidad que implican las relaciones sociales… de género.

Porque en México, no es lo mismo nacer biológicamente hombre que mujer, tener o sentir atracción sexual por una persona de su mismo sexo, ser lesbiana o transexual. Sólo así se explica el surgimiento de tesis con el título: “Homofobia, machismo y misógina, a partir de tres canciones del grupo Molotov", adivine cuáles son...

Urge diferenciar entre género y “sexo”, lo segundo remite a la cuestión biológica e impide dimensionar los fenómenos socio-culturales que el género si permite vislumbrar. Mediante la de-construcción económica-política-socio-cultural de la convivencia cotidiana entre los seres humanos. Personas que sienten, se equivocan, sufren y gozan, pero también se ven a si mismas como objetos de estudio. Por eso es que se recurre al género para referirse a la disforia, entendida como la inconformidad con todo aquello que es impuesto mediante el género, cómo deben comportarse las mujeres, pero sobre todo los hombres: violentos, agresivos, indolentes.

Parafraseando a Marcela Lagarde, “los hombres también tenemos cautiverios”, lo entendemos cuando Juan Guillermo Figueroa cita una línea de Pablo Neruda: “sucede que me canso de ser hombre”, porque agobia lo que la sociedad exige a  quienes nacen biológicamente como varones, desde ejercer un rol de padre de familia protector-proveedor, hasta impedirle externar sus temores y sentimientos.

Estas y otras ideas, serán compartidas y pulidas, durante nuestra participación en el III Encuentro Internacional de Investigación en Estudios de Género, que tendrá lugar en la ciudad y puerto de Acapulco Guerrero, entre el jueves 6 y sábado 8 de junio de 2013. Además de disertar sobre estos temas, tendrá la posibilidad de confesarse ante el mar, así que si tiene oportunidad de estar allá, no deje  de interpelarnos al respecto.

A modo de posdata, diremos que se requiere audacia, osadía para cuestionar los “mandatos de género” y sus respectivos roles. Es preciso deconstruir los mensajes con que nos bombardean los medios, sin olvidar que “el mejor policía es el que se instala en nuestra cabeza”, como advertía la juventud en 1968.

Lo único cierto, es que estamos en el siglo XXI, aunque en ocasiones hayan quienes piensen, actúen y legislen como súbditos-parroquiales del siglo XVI o XIX. Urge que los docentes se sensibilicen, que la comunidad a favor de la diversidad social (reducida a sexual) amplíe su re-conocimiento, mediante la apropiación y puesta en práctica de la perspectiva de género; audazmente conducida por los terrenos más insospechados y reticentes al cambio. En esto último, hogares, familias y el inicio del proceso de socialización que representa la infancia, tienen mucho que aportar y  la perspectiva de género, entendida como zoom sociológico (Fátima Fernández Christlieb, dixit!) puede contribuir a su diseccionamiento.

A unas horas de que comience junio, referido por #Catorcenal como “mes de la diversidad”, podemos decir que apostamos por el reconocimiento de lo diferente, para asumir la diversidad social, compleja, incierta, maniquea a veces, y en eso nos parecemos a nuestros problemas (de investigación) y cotidianos, sólo falta responder ¿qué tan dispuestas estamos a salir de nuestras zonas de confort?

Le esperamos en Acapulco para seguir con este intercambio…

#DíaDelMaestro

Carlos Fazio (periodista): “Cuando todo se reduce al ‘derecho de terceros a transitar’, se debe insistir en reflexionar y desagregar la desigualdad social. Atender, pero sobre todo, entender el problema por sus causas y no por sus consecuencias. Eso es lo que debe ofender, la falta de oportunidades, el desempleo, la violencia sistemática y criminal, en la que cualquiera puede ser víctima. Ante eso, la única consigna del pensamiento crítico y responsable sería, con el gobierno… nunca”.



miércoles, 8 de mayo de 2013

Catorcenal 112: Sara Lovera.



Por. El derroche de todas las noches que da la juventud.


A Regina Martínez (corresponsal del semanario Proceso):
A un año de su asesinato en Veracruz, el clamor no cesa… ¡justicia!

En los meses recientes hemos estado cerca de diferentes mujeres periodistas. Voces femeninas que nutren la disección y el análisis del diario acontecer: Marcela Turati, Lydia Cacho, Carmen Aristegui, Denise Dresser, Nora Patricia Jara, Anabel Hernández y… Sara Lovera.

Conversar con ella es recibir una cátedra periodística de y en contra de la inequidad social. Es coordinadora regional de la Agencia de Noticias de la Mujer Latinoamericana y del Caribe (CEMLAC) y editorialista semanal del Instituto Mexicano de la Radio. “La palabra de Antígona”, como se le conoce en el “submundo” de las redacciones, por la columna semanal que publica y muchos medios replican, a lo largo y ancho de los diferentes México’s para así tomarle el pulso a diferentes temas: violencia en contra de las mujeres, feminicidio, trata, vulnerabilidad económico-socio-cultural (migrantes, periodistas, defensoras de derechos humanos, trabajadoras sexuales o domésticas), interrupción legal del embarazo, entre muchos otros.

Hace unas décadas, dirigía el semanario feminista del periódico La Jornada, “en tiempos en que este diario era un periódico de mucho más peso político que el de ahora”, según sus propias palabras. Una trinchera similar “inventó” en Comunicación e Información de la Mujer (CIMAC) A.C, agencia de noticias con perspectiva de género, que además de abrir debate y sentar precedente informativo respecto a los temas antes mencionados, constituyen la prueba imperiosa de hacer siempre buen periodismo.

Sara Lovera considera que “no hemos llegado a reconocer a las mujeres como personas completas, por el contrario, las seguimos viendo como cuerpos de deseo. Sin otro papel más que el de madres, amantes, objetos sexuales, brujas, putas o monjas, pareciera que no somos seres humanos completos. Así lo reflejan los medios, quienes escriben en ellos… con sus prejuicios, los discursos antiguos en las aulas del Sistema Educativo Nacional”.

Para contrarrestarlo pide: Tener presente la realidad, y que ésta va cambiado dramáticamente. Investigar, porque hoy no hay pretextos, y en cambio hay bastante información. “Aunque los medios no hablen de nuestros derechos”, recrimina para después afirmar: “Al contrario, contribuyen a revictimizar a las mujeres. Reafirman perfiles tradicionales, mucha de su programación o contenido, en el caso de los impresos, reflejan una mujer que sólo existe en las partes ideológicas. Todavía creemos que la vecina nos va a quitar el marido, porque tampoco nosotras hemos evolucionado de forma pareja, es decir, no porque exista feminismo, las mujeres ya saben que tienen derechos. Una de las cosas graves que los medios no hacen es hablar de ellos y eso provoca una masa femenina que no los conoce”.

Importante planear, redactar y corregir esta "reflexión casi quincenal", en el marco del Día Mundial de la Libertad de Prensa (3 de mayo), que la UNESCO decretó hace 20 años. Trascendente hacerlo en un país tan complicado e inseguro para el ejercicio periodístico como México en 2013; cuando se mantiene el asedio constante a instalaciones de medios, ante agresiones frecuentes contra periodistas y comunicadores, impunes la mayoría de las veces.

Ante dichas circunstancias, urge entender que como sociedad, todos perdemos cuando grupos criminales, intereses empresariales (legales o ilegales) y/o cacicazgos políticos, agraden periodistas (esto incluye el acoso judicial por parte de funcionarios públicos). Urge contar con un periodismo más crítico, solidario, que incomode al poder y a su vez, tenga la capacidad de generar sus propios códigos de ética, construir estrategias para blindar la información y establecer medidas precautorias ante la barbarie. También hacen falta más periodistas que vivan y trabajen con pasión, por oficio antes que por título. En pocas palabras: más historias que contar como la de la maestra, Sara Lovera.

Deseo primaveral...  

El mismo que Alan Castillo a.k.a. @Alanez: Quiero ver mis cicatrices, recordar siempre, vivir de la misma manera: conmovido y sin pretensiones. Caminar y no sólo pasar por la vida. Que el orgullo sea mayor al recuento del quebranto, de la pérdida y que las circunstancias adversas nunca signifiquen más que el peso de la gracia. Vivir aquí y ahora…

 Que así sea… #Catorcenal