martes, 31 de marzo de 2015

Catorcenal 144: Manuel Suárez (Motor)


Por. Cartas a un amor perdido…

En “solidaridad gremial” (Mafalda dixit!) ante el  agravio histórico que enfrenta Carmen Aristegui y su equipo: No han entendido que no entienden… que ya no somos los mismos.


Además de ser el mes de la Reconciliación –con el pasado, con el destino, si es que aún creemos en él-, marzo es a partir de ahora, un mes para la música. Así quedó demostrado tras la entrevista que sostuvimos con el vocalista y guitarrista de Motor, Manuel Suárez.  Con él conversamos sobre su actividad creativa y la manera como se produce y distribuye música actualmente.

14Nal: ¿Cómo te sientes, cuál es tu estado de ánimo con respecto a lo que estás haciendo en estos momentos?

Súper contento, acaba de salir el nuevo disco, siempre estás esperando que las cosas se encadenen una con otra, un poco ansioso por ese lado, pero contento. Es el segundo disco de Motor, el décimo de mi carrera, sigo haciendo música que es lo que más me late.

14Nal: ¿Qué es Motor, cómo lo definirías?

Es una banda de rock & roll puro. En el disco más reciente, una de las cosas que logramos, al menos de mi parte, fue despojarme de todos los prejuicios que tenía. Siempre me había retraído mucho en cuestiones como ciertas palabras que no quería usar o ciertas melodías que se me fijaban como una especie de límites de los que no pasaba y en este disco eso se quedó atrás. Conforme va pasando el tiempo vas sabiendo quien eres y eso te va liberando de cualquier tipo de prejuicios. Musicalmente ambos discos son muy setenteros, es hacer rock, que es lo que nos gusta. Componemos de una manera tan libre que el resultado es un disco nada pretencioso, que está prendido, tiene un contexto social, un disco basado en guitarras y nada más

14Nal: ¿Cuál es tu opinión sobre la manera como se produce y distribuye la música actualmente?

Pues es muy diferente a como fue antes. Apenas encontré en casa de mi madre mi primer disco, que cuando estaba por salir, nosotros insistíamos en que tenía que ser en disco compacto, pero la compañía nos decía que no se vendían, que eran muy caros, recuerdo que lo más cañón fue verlo dos o tres semanas después de su lanzamiento, anunciado en la revista Banda Rockera, y esa era la forma de distribución, en el Chopo y tan tan. El primer disco de Guillotina (1994) si salió en casete, pero la promoción seguía siendo en canales de videos, mucha prensa escrita, sobre todo impresa, incluso el contacto con los fans era a través de cartas y era una forma de mantener contacto muy cabrona, y pues ahorita la existencia física de un disco es una cosa que ya no importa tanto.

14Nal: ¿… y sobre la situación del país?

Está de la chingada. Yo creo que somos muy desafortunados teniendo el gobierno que tenemos. Ayer en una entrevista me preguntaban qué se sentía ser mexicano y respondí que depende del contexto. Da pena vivir en un país donde un día desaparecen 43 estudiantes por abrir la boca, donde te persiguen por expresarte en internet, a mi me da tristeza, así yo no quiero ser mexicano, yo no quiero ser parte de eso. Las letras de Motor tratan de eso, reflejan un poco el enojo que tenemos, el disco anterior surgió durante el conflicto electoral del 2012 y ahora nuestras letras están más clavadas en esos rollos, el rock tiene que contar con un contenido social, político. Puede ser artística o metafóricamente, recién escuchaba a Bob Dylan otra vez y efectivamente, era la voz musical de una generación, demasiado vigente desde mi punto de vista.

Fotografía de Gabriel Garibay Ramírez

14Nal: En ese sentido… ¿cómo haces frente desde tu trinchera, la música como proceso creativo pero también político quizá?

Las canciones de Motor tienen que ver mucho con cosas vivenciales, evidentes, de las  que no puedes escapar si de verdad te interesa lo que está pasando. Hay algunas que salieron de calcomanías que la gente pega en la calle, una tiene por coro “nos han quitado tanto, que nos han quitado el miedo”. Es mucho más divertido el principio de Motor que el final de Guillotina. Sonaba a lo mismo porque nosotros nos estamos autocensurando, se convirtió en una banda de culto, y eso es una responsabilidad muy grande. Es una cosa que comprendo ahorita, en ese momento no lo sabía ni de chiste. No es el qué dirán, sino que de repente te das cuenta que lo que has hecho significa algo y no te puedes salir de esos parámetros. Soy la misma persona, en Motor tengo más responsabilidades, en términos administrativos de la banda, pero también tengo claro quién soy y qué es lo que estoy haciendo.

14Nal: ¿Qué decirle a la gente para que escuche la música de Motor?

¿Qué es lo que estás buscando cuando quieres oír una banda nueva? Todos queremos que algo nuevo te sorprenda, hay discos que he hecho y no me pasa eso, a mi el disco más reciente de Motor si me sorprende, creo que es diferente a lo que hice antes. Más que madurez, son los ciclos, no necesariamente tienes que ir hacia adelante en la vida. Son tiempos, como que se alinean las cosas y hay momentos en los que parece que no, simplemente entramos en una armonía, compusimos durante septiembre y octubre, empezamos a grabar las primeras semanas de noviembre y el 2 de enero estaba el disco.

Como músico, mi recuerdo más preciado, sería la primera vez que vi cantar a la gente una rola mía, en 1998, durante la presentación del disco en el Hard Rock Café, eso me recuerda que no hay que esperarnos a ser millonarios para hacer las cosas, hay que hacerlas porque nos gustan, el chiste es creértela y hacer algo porque te apasiona. 






jueves, 5 de marzo de 2015

Catorcenal 143: Foeme


Por. Un mes de reconciliación

#14Nal 1-43: No son ceniza…

Al conjunto musical Foeme lo apreciamos por primera vez, durante una sesión de los “Concierto Cable”, en el auditorio del Museo Franz Mayer en la Ciudad de México. Tenían una magnífica “carta de presentación”, María Camargo, hija de la leyenda del blues “hecho en México”, José (Real de Catorce) Cruz, quien nos entregó una tarjeta con una ardilla como la que aparece a continuación, para posteriormente, concertar una entrevista. Misma que sucedió el pasado martes 24 de febrero, como una especie de sinfonía a varias voces y aquí está el resultado:



#14Nal: ¿Cómo surge Foeme?

Foeme: Arturo y Rodrigo tenían novias gemelas en la secundaria, mismas que también tocaban guitarra y bajo, respectivamente. Básicamente así fue, con el único objetivo de tener nuestra propia banda, dado que ellas eran sumamente competitivas. Primero editamos un EP llamado “Félix”, basándonos en la historia de un ser humano que encuentra su felicidad en un instrumento musical hecho de cristal que se toca con los ojos. Oficialmente, la banda inicia en el 2005, con una presentación en “El sauce boxeador”, con Emmanuel García en la trompeta y Emilio Ponce en la batería. En el 2010 presentamos “El fin del mundo”, entendiendo a éste como el día en el que mueres y lo importante que resulta llegar a ese día satisfecho de lo que hiciste, para eso, tienes que aprovechar tu presente.

#14Nal: ¿Cómo fue grabar tantas versiones de una misma canción, a qué se debió?

Foeme: La última canción de ese primer material se titula “Todos vamos a morir”, de ahí se nos ocurrió grabar una versión de esa canción en un género distinto cada semana del 2012. Esto derivó en un disco de larga duración con 56 versiones diferentes  -contando cuatro bonus track-, aunque no existe físicamente, pueden escucharlo en línea: http://foeme.tumblr.com/discografia.

#14Nal: ¿Qué pasa con el disco “Buenos días”, por qué componerle una canción a cada día de la semana?

Foeme: Es otro disco de larga duración, el cual tuvimos oportunidad de grabar en el estudio “A” del Instituto Mexicano de la Radio –el más grande de América Latina-, cada una de las canciones apuesta por elementos musicales distintos, aunque en el fondo sutilmente comunes. Así pasa con cada día de la semana, sólo que en el bonus track, tema que le da título al material, la pieza es interpretada por una orquesta de manera excepcional.

#14Nal: ¿Cómo es su proceso creativo, quién compone, quién decide los nombres?

Foeme: Cada quien pone de su parte, aunque generalmente es Arturo el que trae las semillas, pero entre todos colaboramos para hacerlas germinar. Somos distintos entre nosotros, pero al mismo tiempo somos muy equilibrados. Precisamente, con “Buenos días”, reunimos la valentía para hacer una gira por Europa (Lisboa, Madrid y Berlín), editamos mil discos aquí y los vendimos por allá, a nuestro regreso al DF maquilamos ese mismo disco en una versión acompañada de 42 páginas con ilustraciones de Hugo Mendoza.

#14Nal: ¿Qué opinan de la manera como se produce y distribuye la música actualmente?

Foeme: Ya casi no nos permitimos escuchar, vivimos ávidos de novedades. Ante la distribución de la música como un servicio, con plataformas como Spotify, así como pagas el cable o la cuenta del celular, ahora pagas tu música para un mes. Aunque esta última es necesaria, también es importante empaparse de la cuestión legal (…) Parece que entre más fácil se vuelve la producción, se pierde el profesionalismo, eso va en detrimento de la calidad. NOS HAN DILUIDO LAS PASIONES, para que no luchemos por lo que queremos hacer. Es necesario mantener un punto de vista crítico, en medio de tanta información no hay que avorazarse. De repente todo pinta fácil, queremos creer que estamos luchando y cambiando el mundo, pero no lo hacemos, no sentimos pasión para luchar por ello. Decimos que necesitamos un cambio… pero de foto de perfil, tiene que ver con una cuestión de necesidad real, pero también con las redes virtuales como un mecanismo de evasión social.

#14Nal: ¿Algún “antídoto” para una situación así de crítica?

Foeme: Inspirar a la gente que siente pasión por lo que hace, que se mueve por sus convicciones, por lo que necesita hacer. En este sentido, a nosotros nos gustaría inspirar al político anti-EPN, que al ser presidente dijera “yo fui a uno de sus conciertos y ahí me di cuenta que quería ser presidente de México para servirle a la gente”. Eso es lo importante, inspirar para que hagas lo que quieras, ya que LAS PALABRAS POR SI MISMAS, TAMBIÉN SON MÚSICA, queremos reivindicar el interés auténtico por ella, más allá de lo mediático, a partir de lo que nos ha tocado hacer, tocar y vivir.


En breve, Foeme presentará su material más reciente: “Incendios”, disco integrado por 15 temas que se distribuirá en tres entregas con cinco canciones cada una. Esta vez, además de apelar a una renovación social-personal, también cuentan con colaboraciones de diferentes exponentes de rap y free style como “Asesino”, entre varios otros. “Es un disco sobre el conflicto, interno y externo, pero también sobre la guerra y la incomodidad que ésta provoca. En 10 años toda ha cambiado, excepto Foeme, hemos tenido que crecer y eso siempre duele, de pronto te ves en la necesidad de renovarte. Eso es ‘Incendios’, un llamado a renovarnos, no sólo a nosotros, también al país”, según palabras de la banda que confía en su propia determinación y en hacer música para toda su vida.

Foeme son:

Arturo Waldo (guitarra)
Rodrigo Prat (bajo)
Alan López (batería)
Emmanuel García “Choby” (trompeta)
Francisco Velasco (tecladista)
Leinad Nuño (corno)
María Camargo (prensa y difusión)


Más información: www.somosunabandaderock.com

viernes, 20 de febrero de 2015

Catorcenal 142: Amores foráneos


Por. Se te acabó quien te quería…

Para Antonio Lego: deseando que su felicidad perdure.





“La peor  forma de extrañar a alguien es estar sentando a su lado y saber que nunca lo podrás tener”
Gabriel García Márquez.


Febrero es el mes del amor. Así lo ha dicho una sociedad que empuja a los hombres a sostener encuentros sexuales múltiples, en términos de una sexualidad más permisiva. En contraste, a las mujeres les resulta un poco restrictiva, por aquello de la “monogamia” asociada a la resignación y el “matrimonio para toda la vida”: Hipocresía social, alimentada por las características adjudicadas al amor romántico, hetero y patriarcal, que recurre a los binarismos para normar y encasillar nuestras personalidades. “Nacemos desnudos y la sociedad nos viste de prejuicios”, dijo alguien durante el tercer año consecutivo del #ForeverAloneFest.

A propósito de esto, en algún momento quisimos escribir algo sobre “el fervor de la soledad”, para citar lo que canta Ana Tijoux: “NO estoy sola, estoy conmigo”, pero la distracción por un “amor a la distancia” lo impidió hasta el día de hoy… Amores foráneos que vienen riendo, luego llorando se van y en ellos se va la vida, que nunca más volverá. Además de parafrasear a Miguel de Unamuno, habría que pensar en las enseñanzas que dejan los ciclos que se cierran (sea una tesis de maestría, un medio comunitario/universitario o la relación con el #AmorProhibido, ahora sublimado como #AmorPerdido).

¿Qué es lo que queda después de los kilómetros recorridos y las experiencias vividas en otros entornos que no son nuestra cotidianidad? Si como canta “El Chapo de Sinaloa”: #NadieEsDeNadie y efectivamente, “no es difícil perder algo que nunca se tuvo”, es momento de empezar a vivir nuevamente en soledad. Recuperar la confianza -nunca totalmente perdida- en que es posible seguir adelante, porque no vivimos del pasado y sabemos que lo mejor SIEMPRE está por venir. A esto hay que agregar que crecimos resistiendo, con esperanza y libertad emocional. De ahí que la indiferencia legislativa, la gandallez de la élite en el poder –insistimos: corrupta, corruptora y asesina-, y la brutalidad de los aparatos represivos del Estado, tampoco nos detengan.

De ahí también, que pese a la perdida del amor foráneo, siempre valdrá la pena recurrir al verso –muy atinado y actual- de Antonio Machado: “Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Al andar se hace camino, y al volver la vista atrás, se ve la senda que nunca se ha de volver a pisar”.

Luego entonces… ¡suspiremos por los amores (foráneos) perdidos! También por aquellos, cuya presencia física nos arrebató la muerte, pero que su espíritu persiste a cada momento y en todo lugar, como una especie de fuerza potente y protectora, que prevalece y envuelve todo a nuestro alrededor. Tampoco olvidemos que hoy como siempre, nos tenemos a nosotros, así que por favor no deje de escribirnos… el momento es ahora o nunca: lacatorcenal@gmail.com

La importancia de llamarse MeMo:

A propósito del Foro de Reflexión sobre MEdios y MOvimientos  Sociales realizado en la UAM-Xochimilco, no queda más que agradecer a todas las personas que colaboraron para hacerlo posible. A ellas y a quienes nos han leído desde hace siete años, reiterarles nuestro compromiso con el periodismo comunitario: autónomo, crítico, diferente…





 #CatorcenalSieteAños “… y sin embargo se mueve”. 


miércoles, 28 de enero de 2015

Catorcenal 141: Siete años después…




Por. Aquel que acompaña tus días


A la MEMOria de Manuel “El Negro” Márquez: a cuatro años de su asesinato…
Para mi hermano Pablo: Por sus primeros 15 eneros.


Todo empezó un domingo, hace siete años, en la redacción del Sistema Nacional de Noticiarios del Instituto Mexicano de la Radio. No le habían renovado el contrato a Carmen Aristegui en W Radio y con esa decisión se terminó uno de los pocos espacios que habían cubierto ampliamente el “agandalle” legislativo cristalizado en la Ley Televisa (2005-2006). Veníamos de la crispación electoral, la cual vivimos como estudiantes de Comunicación Política y devenimos en una generación politizada que materializó su descontento en el portal universitario escrutinio.com.mx.

Siete años después, apenas habían transcurrido los primeros seis días de 2015 y ya se habían registrado tres agresiones contra comunicadores en igual número de entidades federativas en México. De los tres casos, el más preocupante –y no porque los otros no lo sean sino por lo emblemático que resulta- para explicar la situación actual de ejercicio periodístico, es el caso de Moisés Sánchez Cerezo, periodista comunitario sustraído con violencia de su domicilio por un grupo de personas armadas el pasado 2 de enero, en el municipio de Medellín de Bravo, Veracruz, y cuyo cuerpo habría sido encontrado el pasado sábado 24.

¿Qué nos dice eso? Que las condiciones para el ejercicio periodístico en nuestro país no atraviesan por uno de sus mejores momentos. Primero porque se han ido plumas notables (Julio Scherer y Vicente Leñero, para mencionar a dos titanes que hicieron época) y segundo, porque las agresiones contra periodistas críticos no cesan. Al contrario, se multiplican.

Desde que surgió este “espacio de reflexión casi quincenal” la situación ha empeorado. Así lo demuestran las 209 agresiones reportadas en contra de profesionales de la información ocurridas entre diciembre de 2012 y diciembre de 2014. De acuerdo con la organización Artículo 19, “el estado de Veracruz se ha convertido en uno de los lugares más inseguros para el ejercicio periodístico, no sólo en México, en todo el mundo”.

Al “levantamiento” y aparente asesinato de Sánchez, hay que agregar ocho casos más, entre ellos el de Gregorio Jiménez “Goyo” (2014) y el de la corresponsal del semanario Proceso, Regina Martínez (2012),  para un total de 11 asesinatos ocurridos durante la administración a cargo de Javier Duarte de Ochoa, emanado del Partido dizque Revolucionario y quesque Institucional.

Siete años después corroboramos que a la sociedad mexicana siguen sin importarle sus periodistas, y tampoco parece preocuparle que le cercenen su derecho a conocer información de calidad, crítica y confiable. En días pasados, sacudiendo el “archivo personal” acumulado desde 2008 -cuando incursionamos en el periodismo nacional-, entre boletos de conciertos, pases de abordar, boletines de prensa, discos compactos, flyers y fotografías, experimentamos una profunda nostalgia por los encabezados en los que la nota eran los escándalos políticos, tampoco es que sea mejor, pero si menos peor que el horror cotidiano al que nos hemos venido acostumbrando (asesinatos, ejecuciones y/o desapariciones). Días difíciles, pero no imposibles.

Siete años después sólo atinamos a decir… ¡Fortaleza! Lectora, lector, no dejemos de ser desobedientes, tampoco nos permitamos malbaratarlo todo, porque un país como este, así de rico y abundante, sólo hay uno. Hoy más que nunca se vuelve apremiante el escrutinio colectivo y la vigía permanente. Antes que la élite en el poder –corrupta, corruptora y asesina- termine de llevar el barco a pique. No dejemos de escribir, no dejemos de leernos, hagamos de esta vía un conducto para nuestra interacción permanente. Hoy más que nunca lo necesitamos, llegó el momento de hacer que otras cosas sucedan.

Por ello queremos invitarle al Foro de Reflexión: “La importancia de llamarse MeMo”. Donde tres versiones distintas del mismo nombre articularán, debatirán y compartirán puntos de vista sobre la actualidad de los Movimientos Sociales y el desempeño de los Medios en la cobertura de los mismos. Guillermo Henry (Radio UNAM), Guillermo Zapata (Radio Fórmula) y Guillermo Rivera (Catorcenal), le esperan este jueves 29 de enero en punto de las 10 de la mañana en el auditorio Miguel Ángel Granados Chapa (Talleres de Comunicación Social) de la UAM-Xochimilco… ¡Ahí nos vemos!


lunes, 5 de enero de 2015

Catorcenal 140: 2014





Por. En la unión está el futuro…


A la memoria de nuestro camarada Edgar Heiji.


Un sueño eterno para Gabriel García Márquez, Susana Becerra Giovannini, Gustavo Cerati (ahora sí), Enrique Nery, Luis Nishizawa, José Emilio Pacheco, Juan Gelman, Federico Campbell, Emmanuele Carballo, Robin Williams, Silvio Zavala, Luis Herrera de la Fuente, Julio Díaz, Vicente Leñero, Joe Cocker y Luis Méndez “Huicho”. Cien años de José Revueltas, Efraín Huerta, Alaide Foppa, William Burroughs y Octavio Paz. 10 años de Reactor 105 (la única estación de radio-pública-patrocinada, cualquier cosa que eso signifique), “Más pequeños que el Guggenheim” y el inusitado éxito del dramaturgo Alejandro Ricaño, el libro “Voy a morir: biografía de José Cruz“ (fundador de Real de Catorce) escrito por Juan Pablo Proal, Celso Piña “el rebelde del acordeón” musicalizando los 55 años de Canal Once… ¡Naturalmente! El segundo aniversario del Day Off (#SinMiedoAlLunes), cuatro funciones diferentes con el elenco de “Adiós y buena suerte”, una de "Escocia", ambas escritas por Gibrán Portela (ganador del Ariel a Mejor Guión con “La jaula de oro”); tres temporadas distintas de Micro-Teatro México, una ópera-rock: “Orlok, el vampiro”, tres bandas (Sonido San Francisco, Kumbia Queers y Troker), tres conciertos con cada una de ellas, tres noches en Metepec, Estado de México. Un #AmorDeTres, 19 años del Multiforo Cultural Alicia, un lustro con URSS (bajo el árbol), Clínicas de Periodismo Comunitario (en Jalisco, Veracruz y Oaxaca), Festivales de Cine (FICUNAM, Aguascalientes, Oaxaca, Morelia y DocsDF), una retrospectiva de Hayao Miyasaki, la presentación de “Crema de vainilla” y “Nacidas de Eros” cortesía de la maestra en letras mexicanas por la UNAM, Artemisa Téllez; 30 años de La Jornada, 75 aniversario del Fondo de Cultura Económica, 80 años del Palacio de Bellas Artes, 20 años del Centro Nacional de las Artes (Cenart), 15 años de la Ke-Huelga Radio Libre y Social (102.9 FM). Del #AmorProhibido al #AmorPerdido -sin pasar por el #AmorRebelde-, una Feria Nacional de San Marcos después, 90 años de Radio Educación, 20 aniversario del EZLN, 80 años de Leonard Cohen, el adiós a “Radio Etiopía” y el arranque de “Creación y oficio” (co-producción entre Muchitos Locos y Canal 11), el éxito del documental “Café” dirigido por Hatuey Viveros (completamente hablado en náhuatl), una Vela Muxe, la casa blanca de las Lomas, #LaOtraCasaBlanca, Tlatlaya, Ayotzinapa, el movimiento estudiantil #TodosSomosPolitécnico, las leyes secundarias de la reforma en telecomunicaciones #PleitoEntreRicos y los sobornos inmobiliarios por parte del grupo HIGA. 10 años de ser Quiero Club. 90 años de la Facultad de Filosofía y Letras (UNAM), la visita de Paul Zaloom (mejor conocido como Beakman) al Museo UNIVERSUM, 30 años del Sistema de Radio y Televisión Mexiquense, 80 años de Eduardo del Río a.k.a. “RIUS”, entrevistas con Alejandro Magallanes (diseñador gráfico), Patricia Chica (cineasta), Teresa Bruce (guionista), Salón Victoria (banda de ska) y Meras Efímeras (colectivo de iniciativas lúdicas para lesbianas). Actuaciones en vivo de: Tokio Ska Paradise Orchestra, Fangoria, Triciclo Circus Band, La Internacional Sonora Santanera,  Emir Kusturica & The No Smoking Orchestra, Fito Páez, Los Músicos de José (18 años de jazz y funk-rock), Love of Lesbian, Julio Revueltas (16 años después), Caloncho, Warpaint, Los Drama Queers, Alfredo Ríos “El Komander”, La Santa Cecilia , el regreso de Zurdok (sin movimiento), Martirio, 15 años de Vive Ladino (Los Tigres del Norte, Sonido La Changa y Sonorámico), el resurgimiento del ébola, 100 años del inicio de la Primera Guerra Mundial, la Segunda Jornada (ahora) Internacional de Pensamiento Crítico, el I Foro de Alfabetización Mediática e Informacional en Latinoamérica y el Caribe, un Foro de Formación para Documentalistas cortesía de la Cineteca Nacional, el “sueño de una noche de verano” por parte del Festival Internacional Cervantino y los 450 años de William Shakespeare, 20 años de la publicación de la Teoría del Símbolo (Norbert Elias dixit!) y el inicio de los trámites para obtener el grado de maestría…

Así concluyó 2014, sin duda un año difícil y hasta cierto punto decepcionante. Dominado por la incertidumbre e impregnado de una bruma corruptora, que dificulta vislumbrar un panorama diferente para los meses por venir. No obstante, en breve se cumplirán siete años de trabajar en este espacio de reflexión casi quincenal, cuyo único objetivo ha sido y sigue siendo, procurar el diálogo humano y la interacción recíproca a través de la tecnología. 

No queda más que reiterar nuestra disposición para seguir registrando nuestro andar por estas tierras, días díficiles, sin duda, pero nunca imposibles de vivirse. El 2014, un año cabrón que se se va, como los círculos que se cierran y así… todo el tiempo.


¡Un fuerte abrazo hasta donde decida vivir su 2015!


viernes, 12 de diciembre de 2014

Catorcenal 139: Salón Victoria




Por. La esencia de mantenerse con vida


A la memoria de Julio Díaz, músico y baterista de Santa Sabina.
Para el maestro Vicente Leñero (1933-2014): Con profunda admiración…


A los integrantes de Salón Victoria los entrevistamos el 2 de octubre de 2014, cuando recién habían desaparecido los 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa. Con ellos, en su lugar de ensayos, conversamos sobre eso, el movimiento estudiantil de 1968, la represión de entonces, y las consecuencias que ha tenido para la historia de nuestro país, pero también sobre su disco más reciente: “Forajido”, la dinámica que han asumido los integrantes de la banda a partir de su independencia discográfica y la experiencia adquirida en sus incursiones cinematográficas.

Sobre su experiencia reciente al lado de la Sonora Santanera, en el marco de su sexagésimo aniversario, en donde interpretaron “El botones”, Juan Carlos (saxofón) y Bernardo (batería), consideraron que la mejor lección que obtuvieron al compartir escenario con la popular agrupación está en la disciplina y la constancia que logran impregnar en todas y cada una de sus interpretaciones. A decir de Hugo Reyes (trompeta), ésta experiencia y su reciente visita a Colombia como parte del Festival Viva el Planeta, los devolvió a su raíz latina, que encima de redescubrir, retomarán en sus próximas actuaciones.

Juan y Sergio (guitarras) fueron quienes más abundaron en la situación actual de la juventud, no sólo de México, también a nivel mundial, ambos coincidieron en la imagen de terror que se proyecta hacia el exterior, a partir de su paso por Colombia, pero también consideraron que por primera vez, en mucho tiempo, hay un sector muy amplio de la población que se moviliza. “Ahí tenemos a los chavos del Politécnico, que no están de acuerdo con que les modifiquen su reglamente sin haberlos consultado, también están los familiares de las personas desaparecidas que claman justicia”, ejemplificaron.

A propósito del nuevo disco, Pollo (el que grita) explicó que el título hace alusión a la condición de vida de aquellas personas que son perseguidas por su manera de ser, por no renunciar a sus ideales. Es así, porque transcurrido el tiempo se sienten completos, tranquilos, y con ganas de seguir adelante. Ellos, supervivientes a una escena de “ska hecho en México” que se creía pasajera, pero en la cual, sólo algunos continúan. Tienen de su lado las composiciones de Rafael Petriciolet (“Si te vas”, “Excusas”, “El tren de la muerte”), además de una participación reciente en la película “El fuego inolvidable” del director Fernando Benítez, quien también dirigió el video más reciente de la agrupación, presentado ayer jueves 11, en el “Rock Son” del Centro Histórico.

Esto nos hizo rememorar su participación en el soundtrack de la cinta “Perfume de violetas” (Maryse Sistach, 2000), para concluir que sí, hay Salón Victoria para rato, tan es así, que aunque no les fue posible presentarse en la Facultad de Estudios Superiores Acatlán, cancelación debida a los paros estudiantiles de semanas recientes, mañana sábado 13 de diciembre se presentarán en el Núcleo de la Feria de Ocotlán, Jalisco; el sábado 14 en la Plaza Juan Carbo como parte del “Indie Fest 14” de Campeche y el viernes 26 en el Lienzo Charro de Iztapalapa en el marco del “Festival Mundial de las Resistencias y las Rebeldías contra el Capitalismo”; junto a Rastrillos, la H.H. Botellita de Jerez y Polka Madre. Así que si tiene oportunidad… no deje de vibrar al ritmo de buen ska.



Los integrantes del Salón Victoria son:
à Marco Tulio Gámez (bajo)
à Francisco Javier Becerra (trombón)
à Sergio “Checo” Mendoza (guitarra)
à Bernardo Huerta Inclán (batería)
à Juan Carlos Aquino (saxofón)
à Hugo Reyes (trompeta)
à José Luis Calva “Pollo” (el que grita)
à Juan Pérez (guitarra)