miércoles, 30 de julio de 2014

Catorcenal 132: Juventud precaria




Por. Elegante forma de seguir siendo…


A Eduardo del Río “Rius”, por 80 años de humor…


Toda una generación con la esperanza perdida. Si no es como dependiente en cualquier franquicia de comida rápida, es como migrante rumbo a los Estados Unidos de América, con nulos proyectos de vida a largo plazo: sicarios, halcones, mulas, burros… También los hay excluidos de la educación superior, los que no cursarán Filosofía en la preparatoria (si es que llegaran a ella). Tienen legalizada la subcontratación, minadas las prestaciones laborales, disminuidos los puestos de trabajo de tiempo completo, “legalmente” saqueados los recursos naturales… ¿qué les queda?

En principio, un grito desesperado ante una crisis de “valores” cívicos de enormes proporciones. Una supuesta guerra contra el narcotráfico que ha dejado niñas y niños huérfanos, 23 mil 640 asesinatos en los primeros 14 meses de la administración de Enrique Pena-Miento, periodistas desplazados, desapareciones forzadas, en todas estas estadísticas, quienes sobresalen son jóvenes.

Se trata de las y los primeros descendientes de lo que Rosaura Barahona definió como la Generación Agotada: “Los privilegiados estudiaron y soñaron con una carrera que ayudara a cambiar el mundo. Los no privilegiados vieron crecer el abismo entre su mundo y el otro, cuando el campo se terminó y los salarios se degradaron (…) El mundo dice que se globaliza (sólo una parte se puede dar ese lujo) y se agrava la polarización entre el primer y el tercer mundo. México sigue empantanado, a pesar de la alternancia iniciada por el presidente más tonto de nuestra historia. Los insaciables partidos se enriquecen y se adueñan del país. La impunidad sigue imperando en nuestras vidas. Para qué denunciar, si no sucede nada”.

De ahí que no resulte fortuito el respiro profundo que tuvimos que coger antes de escribir lo aquí expuesto. Tampoco es fortuito que esta #Catorcenal sea la número 132, como el espejismo de movimiento social que vivió esta juventud precaria durante el año 2012.

Desmovilizados, cooptadas sus caras mediáticamente más visibles, invalidadas sus consignas a través de las leyes secundarias en materia de radiodifusión y telecomunicaciones. Mismas que no pasaron de ser un pleito entre ricos (agentes preponderantes, competencia económica, monopolios mediáticos). Nada de derecho a la información para quienes estudian Comunicación. Más cadenas televisivas como Televisión Azteca, ahora peor… una para los Vásquez Raña, la suya, por fin, para Carlos Slim.

Lo dicho: una riña entre ricos, en la que el grueso de la población permaneció como espectador, o ni siquiera eso. Juventud precaria que no entendió el por qué de la “nueva” legislación, ni su trascendencia más allá de la cantaleta esa de que bajarían las tarifas.

Nada de medios públicos y mucho menos comunitarios, o si, pero muy al estilo de la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y la TV. ¿A quién le importa la alfabetización de las audiencias, la calidad de los contenidos, la perspectiva de género permeando la programación, la manera tan descabellada en que se recurre a la “publicidad integrada”? Lo mismo para vender “productos milagro” que candidatos presidenciales a través de infomerciales disfrazados de periodismo.

Ante tanta insensatez, quizá el mayor peligro sea volverse personas sordas o indiferentes, para que eso no le pase, escriba: lacatorcenal@gmail.com



martes, 17 de junio de 2014

Catorcenal 131: Alejandro Magallanes



Por. La inteligencia viene de las muelas

Para Juan Guillermo Figueroa:
Lector asiduo, mentor sustituto y co-asesor de la tesis de Maestría que pronto tendrá su réplica oral… ¡es tiempo!


¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Quién? ¿Por qué? ¿Para qué? Es la exposición retrospectiva con la que el diseñador gráfico, Alejandro Magallanes (Ciudad de México, 1971) resume 22 años de trabajo constante, sintetizados a través de 450 carteles que realizó entre 1992 y 2014.

Días antes de la inauguración, el equipo de #Catorcenal conversó con el artista en su estudio de la colonia Narvarte. Ahí confesó que se asume como “un diseñador que se dedica a un montón de cosas”, definió al diseño como “un juego sumamente divertido” y al  proceso creativo que este arte implica como “el intento por resolver un rompecabezas”.

Dado que el diseño persigue el mayor número de espectadores posibles, Magallanes trata que se noten las experiencias que ha tenido a lo largo de su vida.  Asegura que le gusta el diseño, porque a partir de él puede hacer muchas cosas, como esculturas o incluso vestuario. Además de que siempre resulta emocionante dado que se trata del prólogo a la obra de alguien más: dibujos, letras, manejo de imágenes.

Con respecto a la situación actual del país, afirma: “la veo peliaguda, trató de ser idealista y pensar que a mi me toca trabajar con la Cultura, partiendo de que eso es lo mejor que podemos tener como sociedad, apuesto a que gane terreno mediante mi trabajo, y espero que cada quien (desde su trinchera) pueda trabajar para que el país sea mejor”.

Para referirse a la exposición retrospectiva inaugurada el pasado jueves 12 de junio, explicó: “veo al cartel como un medio de difusión que da cuenta de cosas que ya ocurrieron y alguien más quiso hacerlas. Un testimonio de los proyectos en los que me ha tocado participar, y dado que son muchos, quiero que luzcan como muros en la calle”.  

Así que si usted acude, podrá apreciar los carteles diseñados para los largometrajes: Párpados azules, Pachito Rex, Quebranto, Los ladrones viejos, La canción del pulque, Muxes: intrépidas, auténticas y buscadoras de peligro, o Las razones del corazón. Algunos dedicados al Festival Internacional de Cine de Guadalajara, la Universidad del Claustro de Sor Juana, la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil, la Feria Internacional del Libro de Oaxaca, el Vive Latino (2012), Los demonios del Edén (Lydia Cacho dixit!), Editorial Almadía, Ediciones Acapulco,  el Festival Internacional de Cine de la UNAM, Instrumenta Oaxaca, Ambulante: Gira de documentales y nuestro favorito: Rita (Guerrero) en el corazón, entre muchos otros. El orden no es cronológico, sino aleatorio, pues a decir de este egresado de la ahora Facultad de Artes y Diseño de la UNAM (antes Escuela Nacional de Artes Plásticas), “así es como operan las imágenes en nuestra memoria”.

A quienes busquen dedicarse a este oficio, el maestro Magallanes les recuerda que como en todo, “hay que tratar de expandir las fronteras que tenemos en cada uno de nosotros, ser curiosos. En este Taller el diseño sí es un oficio, por lo tanto, cada uno va aprendiendo con el trabajo propio y a partir del trabajo de los demás”, asegura.

Sobre el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2014 a Quino (Joaquín Salvador Lavado), considera “extraordinario que se reconozca al dibujante, pero sobre todo al escritor”. Con respecto a la LVI entrega del Ariel –cuyo cartel diseñó-, aplaude los posicionamientos sobre la deficiente exhibición del Cine Mexicano y considera que “las producciones sobre violencia reflejan una realidad. Desafortunadamente, son expresiones del tiempo que estamos viviendo”.

Los libros tienen lomo, los lomos letras, y Alejandro Magallanes dice tener en el lomo letras, letras que dicen “libros para todos”. ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Quién? ¿Por qué? ¿Para qué? Son preguntas que surgen siempre que se diseña algo, y se exhibe en el Museo de Historia de Tlalpan, ubicado en Plaza de la Constitución número 10, colonia Tlalpan Centro. La exposición permanecerá abierta hasta el domingo 13 de julio, de martes a  domingo entre las 10 y 18 horas. Ojalá pueda asistir…


#ReformaTelecom

“La criatura ya nació, ahora falta ver qué nombre le van a poner”.

#LeyesSecundarias.


martes, 3 de junio de 2014

Catorcenal 130: DesaparicionES…



Por. Localizar a los fantasmas 


A la MEMOria de la MeMaestra Susana B. Giovannini:
“A los lugares que uno ama, no regresa nunca…
Porque uno nunca se va”.  #AsíFue


La Semana Internacional del Detenido Desaparecido puso en evidencia la grave situación que prevalece, no de ahora, sino de varias décadas atrás, en materia de desapariciones forzadas. Situación que se ha ido agudizando con las agresiones hacia integrantes del gremio periodístico, las y los defensores de derechos humanos a lo largo y ancho del territorio nacional, así como en contra de quienes dirigen movimientos que se oponen al despojo, la depredación y el saqueo de los recursos naturales, lo mismo en Cherán, Michoacán; que en San Bartolo Ameyalco, Distrito Federal.

Tan sólo en los primeros 18 meses de la administración federal encabezada por el Sangriento Despeña Miento, el Semanario ZETA de Tijuana Baja California, contabilizó 30 desapariciones forzadas de activistas sociales, esta cifra rebasa los nueve casos presentados durante el mismo periodo en la administración de Felipe Calderón, quien concluyó con un total de 55. Desafortunadamente, todas son referidas indiferenciadamente como “levantones”, pero como ya se sabe, una cosa es padecer estas circunstancias como parte de actividades consideradas “ilícitas” y otra como luchadoras sociales que se oponen a la construcción de represas que inundarán sus comunidades para construir centrales hidroeléctricas que a su vez abastecerán de energía eléctrica a las zonas urbanas… excluyentes, grises y desiguales. Lo anterior es solamente un “botón de muestra”, pues a decir de Héctor, integrante del Comité Cerezo, “anteriormente estas desapariciones forzadas obedecían a un patrón de persecución política e ideológica, cambiando esto con casos recientes en que desaparecen activistas de todo ámbito y condición”.

Ahora que la película de Diego Quemada-Díez, “La jaula de oro”, se convirtió en la ganadora de nueve reconocimientos a lo mejor del Cine durante la 56 entrega de los premios Ariel por parte de la Academia Mexicana de Ciencias y Artes Cinematográficas; valdría la pena reflexionar qué están diciendo este tipo de historias: “Heli”, “La vida precoz y breve de Sabina Rivas”, “Potosí”, “El infierno” o “Miss Bala”, sobre las violaciones a los derechos humanos, las ya mencionadas agresiones contra profesionales de la información y la manera como se relaciona la población con sus autoridades en general.

Si efectivamente, de todos los tipos de violencia, la simbólica es la más sutil y peligrosa, este tipo de violencia presentada por las producciones antes mencionadas permiten reflexionar a la corrupción de los grupos en el poder como la causa-consecuencia de la violencia desbordada que padecemos en conjunto. Como ya se dijo, no es de ahora, sino un proceso mucho más largo y complejo.

Recientemente, la serie producida y transmitida por Canal Once, “Crónica de castas”, retomó –muy a su manera- la historia de un trío de guerrilleros que durante los años 70 fueron torturados por un general del Ejército Mexicano. Al final de lo que aparentemente será la primera temporada, se hizo referencia al “sistema de castas que aún prevalece en la manera como –no sólo los mexicanos- todos los pueblos de América Latina se relacionan con sus gobernantes”.

A nosotros nos “cayó un 20” durante los primeros días de enero de 2014 en la Ciudad de Ixtepec, Oaxaca. Ocurrió junto a las vías del tren. Había un vagón estacionado tapizado con fotografías de migrantes centroamericanos desaparecidos en su tránsito por México con dirección a Estados Unidos de América. Entonces supimos del Comité de Familiares de Migrantes Fallecidos y Desaparecidos sección El Salvador. En realidad, ya había ocurrido antes, con la desaparición de las y los jóvenes del bar Heaven en la Zona Rosa de la Ciudad de México, un domingo 26 de mayo de 2013. Como sucede constantemente en Culiacán, Sinaloa; Ciudad Juárez, Chihuahua; los estados de Guerrero, Morelos, Michoacán y el Distrito Federal.

En algunas latitudes se asocia con grupos del crimen organizado, en otras simplemente no se dice nada. Es la extraña sensación que producen las desapariciones. Cada vez más frecuentes. De repente muy cercanas… “¿Y a dónde van los desaparecidos? ¿Y por qué es que se desaparecen?”, preguntaba muy insistente Rubén Blades. No obstante, desaparecer no es morir; luego entonces…  ¿qué sienten los demás cuando alguien desaparece?, ¿madres y padres lloran a sus hijas desaparecidas o simplemente las olvidan y siguen su vida como si nunca hubiera estado allí?

Píenselo y si sus actividades se lo permiten, envíe una respuesta a  lacatorcenal@gmail.com, mientras lo piensa aquí le dejamos este pensamiento:


“El silencio absoluto// Se escuchó en la Ciudad cuando desapareciste// Te convertiste en mi sueño eterno, esperando el día en que vuelva… a verte sonreír. Espero el día que llenes de nuevo este espacio tan solo, tan seco// Con tu luz de colores, con tu olor… a flores, a dulce// La luna me confesó que no volverás, y lo sé… porque tus lágrimas se convirtieron en las estrellas de mi cielo”.

Leticia Díaz, Ciudad Juárez Chihuahua, 22 octubre de 2012.



martes, 29 de abril de 2014

Catorcenal 129: Aguascalientes a.k.a. FICAgs




Por. Cambiarás cuando te marches


A la memoria de Emmanuel Carballo:
Porque en medio de tanto Gabo, su lamentable deceso se vio opacado…


Viajar a Aguascalientes viniendo del norte del país es más divertido, incluso económico, que llegar directo desde México D.F. Se vale respirar por un instante en Mazatlán, Sinaloa; para coger aliento suficiente que permita seguir adelante en “este gran escenario que se llama vida”; porque robarle un atardecer al norte de México (aunque sea de pisa y corre) siempre es algo que devuelve el ánimo y aviva la creatividad.

Tomar aliento suficiente para, entonces sí, acudir al Festival Internacional de Cine de Aguascalientes. Presenciar una parte de la retrospectiva sobre Hayao Miyazaki, como botón de muestra de Japón, el país invitado. Transitar de la agonía al éxtasis con películas como De tal padre tal hijo (Hirokazu Kore-eda) y Vamos a jugar al infierno (Sion Sono), ambas de 2013. Explorar el sentido público del Cine mediante proyecciones al aire libre, así como su trascendencia para la construcción de audiencias crí-ti-cas, pues aunque el Teatro Morelos estuvo obstruido por las obras de remodelación del Centro de la capital hidro-cálida, pudimos participar del Primer Encuentro de la Crítica Cinematográfica, auspiciado por el Museo de Historia Regional, mismo que  contó con la presencia de Carlos Bonfil, Jaime Aparicio y Hugo Leyva, entre otros; y concluyó con la consigna de que “más allá de las tecnologías, entendidas éstas como herramientas, los contenidos cinematográficos son los que harán la diferencia”.

Acudir a la presentación del libro: Ciudad, lugares, gente y cine. Apropiación del espectáculo cinematográfico en Aguascalientes (1897-1933) de la maestra Evelia Reyes Díaz. En el cual, la autora se refiere a ésta como una apropiación poli-semántica (medio, ritual, experiencia) que conlleva distintos niveles, “a tal grado, que se puede hablar de una revolución de espacios sociales en la que el Cine adquiere una dimensión politico﷽﷽﷽﷽﷽el Cine adquiere una dimensi conlleva distintos niveles, "e tal suerte que permietítico-electoral, pero también educativa”.

Atestiguar la ferviente relación que guardan los habitantes de Aguascalientes con la Muerte, primero en el Museo Nacional de la Muerte, después en el José Guadalupe Posada, y posteriormente, con la cinematografía local que presentó el Festival, como el cortometraje Dame Posada (Lio Vargas) y la película Blues de media noche de Omar Linares (2014). 

Mención aparte merece la plataforma multi-tecnológica: ExperimentAgs. Misma que permitió la grabación en vivo de tres cortometrajes con 30 minutos de duración, transmitidos simultáneamente al público del Teatro Morelos y por internet a través de streaming durante las noches del martes 15, miércoles 16 y jueves 17 de abril. En la opinión del crítico Abel Cervantes, “se trata de un ejercicio que resulta interesante y original, pero sin certeza. Ya que el regrabar algunas secuencias después de la transmisión genera dudas, por ello es que más allá del júbilo, hay que mantenerse atentos al resultado final”.

Ya de salida, tuvimos  oportunidad de presenciar el arranque de la Feria Nacional de San Marcos a.k.í “la Feria de todos”. Desde su montaje, la novillada, los voladores de Papantla y las aglomeraciones en las calles, pasando por la música de Banda (otra vez Mazatlán en las pupilas), la extrema vigilancia y una sensación contundente de que pase lo que pase habrá que continuar escribiendo,  porque como dice Don DeLillo: “escribir es una forma de libertad individual. Nos libera de la libertad de masas que el mercado nos reitera constantemente. Al final, los escritores escribirán no para convertirse en héroes de una cultura subterránea, sino más bien para salvarse a sí mismos, para sobrevivir como individuos”.

Si no lo cree, acuérdese de Acapulco


#NotaMental

La vida es eso que pasa mientras se toma unos sorbos de:

  • Tuba
  • Tascalate
  • Tejate
  • Tepache
  • Tejuino o
  • Tequila

¡Salud y saludos para tod@s! Nos leemos pronto…


miércoles, 9 de abril de 2014

Catorcenal 128: Susana B. Giovannini



Por. La promesa de un nuevo comienzo...

Para “el amor que no se atreve a decir su nombre”:
Aunque yo esté lejos, cuidaré de cerca… tus pasos.


A la Maestra Susana Rita Becerra Giovannini la conocimos hace poco más de 10 años, durante el primer semestre de la licenciatura en Ciencias de la Comunicación, en la  Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Ella, una superviviente a la dictadura argentina de los años 70, impartía la clase “Estado, sistema, poder político y comunicación”; todos esos conceptos desde la perspectiva del materialismo histórico-dialéctico.

Por ella conocimos de los feminicidios en Ciudad Juárez, Chihuahua y de las Juntas de Buen Gobierno a.k.a. “caracoles zapatistas” en Chiapas. Con ella estudiamos Cien años de soledad de Gabriel García Márquez y fue ella quien nos explicó la diferencia entre el “gallo negro” (grandote y traidor) y el “gallo rojo” (pequeñito y valiente): “porque si cantará el gallo rojo, otro gallo cantaría…”

Fue ella quien nos acercó a la obra y el pensamiento de Carlos Fazio, Jorge Turner, Juan Gelman, Bolívar Echeverría, Adolfo Sánchez Vázquez, Rodolfo Mondolfo y su verum factum,  Antonio Pasquali, Noam Chomsky con su “gramática generativa” y Armand Mattelart. A ella dedicamos esta “reflexión casi quincenal”, porque forjó nuestro gen académico al permitir desempeñarnos como sus ayudantes en asignaturas por demás estimulantes, como Teorías de la Comunicación I y II, y esa otra que a ella tanto le gustaba y que hoy soporta nuestro andar por estas tierras profesionalmente-universitarias: Comunicación Política.

A las clases particulares de Filosofía para la Vida hay que agregar nuestro acercamiento con la perspectiva de género para efectos de la investigación social, la diferencianción científica, objetiva y definitiva entre los conceptos de Comunicación e Información, así como el hecho de que fungiera como sinodal en nuestro examen de licenciatura… “¿Cómo hablar en pasado de alguien que sigue formando parte de mi presente?”, se preguntó Cristina Romo tras la muerte de su compañero de vida, el escritor y poeta José Emilio Pacheco.

Nosotros respondemos que se puede seguir adelante siempre y cuando hablemos en plural, con un “nosotros incluyente” que permita conjurar al fantasma de la muerte y así cumplir con la consigna barrial: NO SE MUERE QUIEN SE VA, SÓLO SE MUERE QUIEN SE OLVIDA. Porque además de INOLVIDABLE, la Maestra Susana pasará a la historia como una “eminencia en Teorías de la Comunicación (humana)” y como una de las pocas luchadoras sociales perseguidas por América Latina, que después de 37 años pudo regresar a morir en su tierra natal.

Tras su fallecimiento, hemos comprendido que de ahora en adelante, marzo será un mes de reconciliación con el pasado, con el destino (si es que aún creemos en él), con los proyectos pendientes, en el mejor de los casos, elegidos por nosotras mismas. En pocas palabras: el momento oportuno para hacer lo que tenemos que hacer.  Por eso es que, aunque aparentemente el luto duró poco, con la muerte de la Maestra sucedió una reactivación intelectual que apresta a finiquitar un par de asuntos pendientes, de una vez y para siempre.

Es por eso que quisimos documentar y compartir su espíritu de guerrera, así como las directrices de pensamiento que Giovannini heredó, junto con sus programas académicos y un nutrido lote de libros. Aunque lo más trascendente es el método didáctico de enseñanza-aprendizaje que a través de la teoría crítica impulsa la autogestión (desde uno mismo) como forma de gobierno.

A la Maestra Susana Rita Becerra Giovannini debemos la premisa que entiende y estudia a la América Latina como una tierra de Utopía, explicando a ésta como “el horizonte siempre visto en lontananza, que cada vez que nos acercamos a él… cambia, se aleja”. De ella también aprendimos que se puede transformar y entender a la vida misma como un objeto de estudio. Y al método como la posibilidad del con-saber a.k.a. conocimiento, que siempre ha de ser entre los otros, nosotros.

En el homenaje que le celebramos en la UNAM el martes 1º de marzo de 2011 se despidió citando a otra víctima del exilio forzado, el escritor Augusto Monterroso: “a los lugares que uno ama, no regresa nunca… porque uno nunca se va”. Y así es querida Maestra, usted nunca se irá de Ciudad Universitaria.


Verso Cinematográfico:

“Yo me enamoré del viento
Del viento me enamoré
Y como el amor es del viento
En el viento me quedé…”

Historia de un gran amor (Julio Bracho,1942).